jueves, 20 de diciembre de 2012

Killers atemporales

Grant Holt, Adam Le Fondre, Rickie Lambert, Glenn Murray, Luciano Becchio, Charlie Austin y Jordan Rohdes. Nombres. Delanteros que están haciéndose notar en Premier League y Championship cuando sus carreras empezaron en las ligas semiprofesionales o iban en clara decadencia. No todos, es obvio, han pasado por situaciones extremas, pero es curioso observar que triunfen aquellos que en su día fueron rechazados por directivos que fracasaron en su intento de encontrar a alguien.

El atacante del Norwich ha pasado por tantos equipos como años ha durado su andadura por el fútbol, se podría decir. Con su actual equipo le llegó la estabilidad, Paul Lambert lo trajo de League Two, se convirtió en máximo goleador de League One, Championship, y hasta ahora en Premier sus números no están dejando lugar a dudas sobre la calidad y el olfato que atesora este delantero.

Le Fondre y Lambert tienen una historia parecida, separada en años, pero salieron de la misma escuela, la del Stockport County, fruto de muchos jugadores talentosos de primer nivel. El primero se está convirtiendo poco a poco en la primera baza atacante del Reading, que funciona más bien poco en la primera categoría a día de hoy. Quizá él sea de las pocas alegrías. El segundo ha llegado con los 30 años cumplidos, habiendo luchado por llegar en "equipazos" de la talla del Southend United. Está aportando goles en Southampton y logrando, de momento, que el equipo se mantenga con vida.

Glenn Murray es la sorpresa de Championship sin duda esta campaña. Fue un fichaje extrañó realizado por el Crystal Palace el verano de 2011 del Brighton, donde cuajó buen año en League One. Luchador incansable de ligas menores inglesas, llegando en algún momento a no contar para entrenadores de la tercera categoría, ve como bien entrado en los 29 años lucha por ser el máximo goleador en la segunda división de Inglaterra.

El de Luciano Becchio quizá sea el caso más conocido por aficionados españoles que no siguen más allá de Premier League, y es que, el delantero argentino del Leeds United estuvo en las categorías inferiores del Barcelona, donde finalmente no tuvo hueco y hubo de buscarse la vida en Ellan Road. Mal del todo no le ha ido, entre otras cosas es ídolo de una exigente afición y todas las temporadas desde que está bien situado en el país termina en el top 10 de goleadores de su liga.

Charlie Austin. El error más grande de un director de academia lo cometió el del Reading en el año 2004 rechazando a este delantero para que siguiese bajo la disciplina del club. Poole, Swindon y Burnley, entre otros equipos desconocidos lo han disfrutado, y los últimos, siguen haciéndolo. Líder de goles en Championship y probablemente sea el artífice de que el conjunto de Turf Moor no esté en zona baja.

Jordan Rohdes, otro error de sistema de canteras, esta vez en Ipswich, donde llevan unos cuantos (Owain Garvan y Connor Wicham, por ejemplo). El internacional escocés mete goles para el Blackburn en la actualidad, pero en su día tuvo que decidirse por pelear desde League One para poder cumplir su sueño de triunfar en el fútbol profesional. La pasada temporada, en Huddersfield, anotó 45 tantos en 44 encuentros, cifra que logró un fichaje por 8.000.000 € a su actual club.

viernes, 30 de noviembre de 2012

¿Por qué fútbol?

Quizá nadie le encuentra sentido a la obsesión sentida por algunas personas como servidor por ciertas cosas de la vida. En mi caso, el fútbol, tiene la mayor de las defensas como pasión desbordante que puede con todos aquellos problemas que han salido al paso en mi corta vida. Siempre ha estado ahí, como parte del problema, pero a su vez de la solución, y cuando la preocupación era ajena a él también me evadía, entonces. ¿Qué reprochar a algo que te da la felicidad?

No hay motivo para alarmarse cuando veo un balón rodar, sea en una plaza, un parque, una pista de fútbol sala a pleno sol, o con lluvia, un estadio para miles de personas, o un campo de pueblo en el que, a lo sumo, van cientos de aficionados, en su mayoría padres, amigos, o novias de quienes se dejan la piel sabiendo que no van a llegar a vivir de ello. Pero estos, a su vez, se plantean la misma cuestión, ¿ y qué? ¿Qué más da si no logro comer del fútbol, si en realidad es el responsable de que viva? 

La justificación ante todo problema siempre es el fútbol, si estás mal con tu chica, te peleas con la familia, te van mal los estudios, o el trabajo ves, observa en cualquier lugar a gente dando patadas al balón, aunque sin calidad, y viendo que quienes lo hacen no llegarán a más que jugar en el lugar donde están, la simple mirada a su rostro y ver esbozar sonrisas de felicidad, aunque sus vidas estén en mal momento, ya merece la pena. Si esto no funciona, prueba a ser tú quien da con alegría puntapiés al esférico, solo en la pared de tu casa, o en compañía con amigos. Seguro que este método es infalible.

El fútbol quizá sea la máxima expresión de que algo muy cotidiano puede evadir a cualquiera de la vida misma. No hay manera de plasmar sobre cualquier hoja en blanco, blog, web, o derivados, aquello que el deporte rey hace por las personas. Se le ataca por mediático, pero quien lo mediatiza no es aquel que lo vive, sino aquel que lo intenta entender, porque es imposible captar sentimientos, acciones, hechos que suceden independientemente unos de otros, que no se pueden repetir, nunca sucede nada igual dentro de nuestro amado balompié.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Pérdida de pasión

Aunque suelo abstenerme de opinar en primera persona del singular, creo que Mario, Jonatan, Iñaki, Alberto, José Enrique, Jordi, e incluso David, con quien hablé una sola vez, merecen que cuente ciertas cosas.

Empecé en la representación por pasión a este deporte, intentando ayudar a quienes buscaban crecer futbolísticamente y encontrar oportunidades que no les habían llegado aún pese a su valía. Camino difícil escogí. Mis padres, amigos, y conocidos, pese a todo, me apoyaron, aunque alguna burla hube de aguantar, pues no me veían capaz de afrontar las dificultades de este mundo a mi corta edad de 17 años.

A principios de 2012, casi sin querer ya tenía una agenda de contactos que algún representante querría, pero seguía sin lograr aquello que buscaba, no encontraba equipo para nadie por mucho que lo intentase. En ese momento apareció Jonatan Cano Jiménez por el camino, y tras varias conversaciones se ofreció a ayudarme. Primeras reuniones con equipos bastante serios de 3ª, parecía que se encauzaba el rumbo.

Este verano empezó realmente lo fuerte. Llegó Mario Carvalho De Sousa. Acababa de crear una empresa, y aprovechando el contacto con nosotros por otros medios, nos ofreció entrar en el proyecto. Aceptamos sin plantearnos en ningún momento cómo saldrían las cosas. Crecieron contactos, creció la empresa, todo iba viento en popa. En cuanto a mi situación, mucho problema personal y pérdida de pasión total. A finales de verano, en septiembre, pedí un cambio de rol, de representante a ojeador, pero seguía mi pérdida de pasión a un ritmo acelerado. 

Lo cierto es que ahora necesito pensar qué quiero hacer con el fútbol dentro de mi vida, ellos van a ser siempre grandes amigos, no tengo duda de ello, la empresa va a ser muy importante, sin mi, pero no me arrepentiré, antes que perder mi pasión por el fútbol pierdo cualquier otra cosa. Espero que lo entendáis.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Acción-Reacción

Cuesta creer, pero estos tiempos que corren, solo a veces, logran sacar la mejor de las ideas en las mentes privilegiadas (de verdad) de la gente. No obstante, cuando aprieta la economía es el momento en el cual mayor presión siente un trabajador, un ejecutivo o cualquier persona de calle si observa angustiosamente que el sueldo con el que vive (o malvive) puede irse de sus manos en un día.

La parrafada inicial, remite básicamente a un hecho, futbolísticamente hablando, claro, pues resulta que los clubes, viendo que debían apretarse los cinturones, han comenzado a fichar a precio de risa, o gratis en muchos casos, y han encontrado verdaderas joyas que antes, en la época de derroche de la España constructora ni se miraban por el hecho de poder ir a por alguien mucho más caro (probablemente con peor calidad) pero que contaba con renombre por terminar en 'inho'.

Valencia es quizá el mejor ejemplo de directivos y demás que se han tenido que poner las pilas, pues veían cómo los dos equipos de la ciudad, Valencia CF y Levante UD, desaparecerían casi de la noche a la mañana por la irresponsabilidad, suya o de otros, desarrollada hasta el momento.

En el caso "ché" los números son arrolladores, se fichó a gente con buen cartel internacional, sí, pero en el equipo rindieron más bien poco. Recordarán a Manuel Fernandes, Nikola Zigic (ambos costaron más de 15 millones cada uno), Thiago Carleto (63 minutos ante el Racing en Mestalla), Bruno Saltor (jugaba poco, y hacía lo que podía). Todo eran fallos, hasta que aparecieron los Mata (medio millón), Guaita y Jordi Alba (canteranos), Feghouli (gratis). Ese cambio de dinámica, además de unas espectaculares ganancias, propiciaron que el club disfrutara de auténticos jugadorazos que lo daban todo, pero la pregunta es ¿por qué no antes?

Siguiendo un poco la dinámica, hablar del Levante es más o menos hacerlo de algo parecido, aunque a menor escala. Recordar que en 2005 se fichó a semirretirados estilo Mjyallby o Berson y en 2007 a gente como Kapo o Cirillo es para que se planteasen un poco en el "Ciutat de València" la idea de contratar a gente seria para realizar ciertas acciones. Sucedió cuando descendieron, Manolo Salvador confeccionó una plantilla que hoy forma la base del "EuroLevante". 

Poco más que añadir, se fichó de forma irregular y sin mirar verdaderas carencias, se paga todo con deudas acumuladas que al Valencia le cuesta no tener un nuevo estadio y al Levante vender siempre al jugador que destaca, cosa que a sus vecinos, por cierto, también les sucede.

jueves, 26 de julio de 2012

La emergencia ante lo emergente

Qatar, Brasil, China...así una larga lista de países cuyas economías pasan por un gran momento, lo cual implica una mayor capacidad a la hora de competir internacionalmente en el mercado con cualquier otro país, como siempre, el fútbol, es el espejo del mundo, social y económicamente. En Europa, en cambio, los países, con las excepciones que todos sabemos, pasan por un momento muy delicado y en muchas ocasiones sobreviven de cantera y fichajes sin coste alguno. 

Estas dos situaciones totalmente antagónicas no muestran otra cosa que la realidad, y en el viejo continente, lo cierto es que cada vez se consigue retener a menor cantidad de talentos. Ya no solo se van los mayores de 30 años a buscar un retiro dorado, también hay jóvenes, véase caso de Gio Moreno o Darío Conca que ni siquiera han pasado por Europa y están jugando en China. Cierto que siguen yendo a esas zonas jugadores en el ocaso de su carrera, como Raúl, Drogba, Anelka, Yakubu, Seedorf, Ronaldinho, Luís Fabiano, Kanouté y muchos otros, no obstante, en Europa se han empezado a realizar fichajes para equipos de primer nivel procedentes de ligas de esos países, lo que implica que está produciéndose un cambio de tendencia.

Como antes hemos adelantado, en Europa empieza a premiar la austeridad, utilizando la cantera como nunca se había hecho en muchos casos y peleando contra economías mucho más fuertes explotando al máximo la materia prima que puede sacar un club para evitar afrontar posibles luchas con equipos de otro continente muy superiores en el tema económico. Se estará logrando más o menos, en algunos casos se han logrado grandes cosas a base de cantera, en cambio, otros proyectos han fracasado estrepitosamente con el mismo sistema. Una cosa está clara, la cantera goza de buena salud, ahora bien, ¿qué puede pasar dentro de unos años? 

La tendencia histórica es que los talentos pueriles o juveniles de otros continentes lleguen a Europa a explotar su fútbol, pero el problema se centra en que la tendencia se ha invertido también en estos términos. En unos años pasaremos a ver como los chicos que destacan en cantera en el viejo continente, recibirán suculentas ofertas para completar su formación, con lo cual, se puede plantear una pregunta, ¿Será tan brutal el cambio de tendencia en el fútbol mundial?

miércoles, 20 de junio de 2012

La esperpentización del fútbol español.

Ramón María del Valle-Inclán plasmaba en su famosa obra 'Luces de bohemia' una España en la que predominaban la picaresca y la maleza entre las gentes que poblaban el país. No iba nada desencaminado si trataba de reflejar lo que sería durante, al menos, el próximo siglo, la sociedad española, pues poco parece que hayamos evolucionado. Cambia el contexto, pero no lo hacen los hechos, y el comportamiento moral de la nación se ha traspapelado al fútbol.

La selección de fútbol es la mejor del mundo, pues lo reflejan sus resultados, y tanto Real Madrid como Barcelona son los mejores equipos del momento en el panorama futbolístico internacional, pero, ¿y el resto?
Es obvio que el reparto de derechos televisivos no es equitativo, además de que Mediapro no paga, pero la situación no radica en ello, sino en que los demás clubes que no son grandes en este país, se dejan llevar por la sociedad, porque, como se ha dicho anteriormente, en ellos predominan la picaresca y la maleza.

Lo primero que da que pensar el hecho de ponerse a ver la cantera de cada conjunto, uno por uno, y observar que en la mayoría de clubes hay mínimo algún familiar de directivos, los cuales, con picaresca, han metido baza en el club para que su gente entre lo más hondo posible de la institución. Esta idea de enchufar a familiares favorece la bajada de nivel de la cantera, pues pudiendo estar gente realmente válida en cualquier conjunto, las plazas están ocupadas por quienes tiene un buen apellido. Por tanto, observamos que saber aprovechar un alto cargo está de moda en este país, y, como no, en el fútbol.

La maleza se ve en los entrenamientos diarios y en el trato que algunos entrenadores, directores deportivos o dirigentes dan a jugadores que defienden el mismo escudo que ellos. No son pocos los casos en que los trajeados directivos han acudido a un entrenamiento a increpar a un equipo de juveniles por no obtener resultados, o en los que a buenos futbolistas con gran proyección, por causa de lesiones, se le ha echado de un club. Estas situaciones provocan que gente muy apta para el fútbol profesional se lo deje debido a la presión que, ya desde pequeños, se ejerce sobre ellos, y propicia la aparición de deportistas con menos nivel, que, aunque sean buenos, no llegan al nivel de los mejores.

Estos rasgos se observan sobre todo en segunda división, ya que este año, salvo los tres conjuntos que han ascendido, el resto no contaban con un nivel a la altura de la categoría, en el que probablemente, ha sido el peor curso en calidad de la última década. Esto puede ser llamado la esperpentización del fútbol español, pues es lo que se ha conseguido, ensuciar el balompié hasta el punto de rebajarlo de nivel.

domingo, 13 de mayo de 2012

El maldito dogma

Con el paso del tiempo, el fútbol ha ido cogiendo cada vez más protagonismo en la sociedad, hasta tal punto, que se ha convertido en la primera elección de las personas para evadirse del mundo tan frenético en que vivimos. El contexto que nos toca vivir, quizá no es el más apropiado para crear aún más alarma social, y la mejor manera de evitar que las personas se preocupen, es dándoles un sustitutivo que logre salvaguardar, al menos moralmente, las necesidades acaecidas por la crisis económica.

El balompié es algo que apasiona a miles de millones de personas en el planeta, de ello se aprovechan los medios, para crear un mundo paralelo, en el que este deporte se convierte en religión y, por tanto, se dogmatiza algo tan simple como un juego. Los canales de televisión y radio, la prensa escrita tanto en papel como digital, tienen la culpa, sí, pero el aficionado es quien más culpable debe sentirse si esto alguna vez pasa de castaño a oscuro.

Volviendo al tema en sí, es fácilmente comprobable que a la gente lo que realmente le gusta es la carnaza, no se mira si el delantero de tu equipo ha marcado un gol que le ha dado los tres puntos, ahora se ve si el entrenador le ha dicho a un aficionado que no haga el tonto con la chaqueta que hace frío. La seriedad brilla por su ausencia. Analizar un partido ya no se trata de comprobar cómo ha salido un conjunto a nivel esquemático, ahora se mira si el capitán ha entrado al campo primero con la pierna izquierda, o el vídeo de motivación que ha puesto el entrenador para que el equipo salga animado a jugar.

Si hay estereotipos de esta situación, los podemos encontrar fácilmente en los porgramas diarios que acaban y comienzan el día durante toda la semana en cadenas de segunda, pero que ven en este tipo de espectáculos grotescos su mayor baza para captar audiencia (todos sabemos de quién hablamos). En estos "debates" (luchas de a ver quién grita más), se evidencia perfectamente en lo que se ha convertido esto.

Bielsa, Guardiola, Mourinho, quizá ellos no busquen que se les persiga, ojee o mire, pero se están convirtiendo, si no lo han hecho ya, en dioses que no tiene nada que ver con el deporte. Se sigue su estilo de vida, de trabajo, se han montado auténticos fenómenos fan a su alrededor. De verdad, seamos serios, o el maldito dogma se comerá las raíces de lo que verdaderamente es el deporte. 

viernes, 27 de abril de 2012

Ipswich Town, despilfarrando cantera

El eterno debate de cartera contra cantera nos lleva esta vez, lejos de los focos mediáticos de la ya conocida rivalidad entre Madrid y Barça en este aspecto, a hablar de un conjunto de Championship que, año tras año, desperdicia a un jugador de cantera apostando por una política de derroche, la cual, de momento, está siendo poco fructífera.

Esta está siendo la temporada de dos jugadores, ambos delanteros, en League One, uno muy mediático, Jordan Rohdes, del Huddersfield, y otro que está pasando más desapercibido porque en su equpo prima más lo colectivo, es Dean Bowditch, del MK Dons. El primero ha conseguido esta temporada a falta de un partido de liga y tres del Play Off por jugar, la abultada cifra de 37 goles. Mientras que el otro ha conseguido 13 goles, pero está destacando por el número de asistencias, 14, y tiene el mismo número de encuentros por disputar que su compañero de cantera. En el Play Off, además, se verán enfrentados en las semifinales.

Pasando a otro tipo de jugadores que han salido de la misma escuela que los otros dos delanteros, encontramos otro caso de jugador capacitado sobradamente, para formar parte del proyecto de los tractor boys en su búsqueda por volver a los días de gloria en la máxima categoría. Owain Garvan es un centro campista de los que gustan a entrenadores que quieren guerra en sus equipos, sin dejar de ser bastante técnico y con buena visión de juego, donde destaca es en la rapidez y contundencia a la hora de cortar las jugadas rivales. Otro aspecto de su juego son los goles, este año lleva tres y suele salir a unos 4 por temporada. Su equipo, el Crystal Palace, de Championship.

En ese mismo conjunto, el portero suplente es, curiosamente, canterano del Ipswich, ha llegado a jugar en Premier League con el Derby County, por tanto, es algo más conocido por los aficionados, es Lewis Price.
Guardameta rígido, alto, lento de reflejos pero que entiende de colocar a la defensa y debería salir pronto de ese equipo, ya que Julián Speroni, el argentino, es demasiada competencia en nombre y experiencia para él.

El último canterano ilustre, aunque este bien podría no ser un derroche sino una gran acción económica por parte del equipo, es el delantero Connor Wickham, del Sunderland, internacional sub21 con Inglaterra y que tiene un futuro prometedor, debutó a los 16 años con la entidad y tres veranos después partió rumbo al Stadium Of Light.

Sin duda, el debate se puede abrir rápidamente en el momento por el que el fútbol atraviesa, en el cual, es más impera la ley del que más ficha, y no la del que mejor gestiona sus recursos. El Ipswich, pese a sus muchas inversiones económicas fallidas, sigue sin confiar en la cantera. ¿Aprenderán?

miércoles, 18 de abril de 2012

Darren Ferguson, la consagración

El fútbol es tan injusto como la vida misma, no siempre gana el que más ha trabajadado, mejor ha jugado, o mayor porcentaje de acierto en pases ha tenido, pero eso es lo que hace de este deporte algo tan bonito a la par que irritante.Darren Ferguson, hijo de Sir Alex, es una de esas personas a la que el infortunio estuvo a punto de robarle el prestigio como entrenador pese a haber logrado grandes cosas con brillantez en lo táctico y esplendor en lo estético.

El Peterborough United puede alardear de pocas cosas a nivel mediático, nunca ha estado en la Premier League y afronta su octava temporada en Championship el año que viene tras permanecer este, gracias, entre otros factores, a tener un entrenador líder, capaz de sacar lo mejor de cada uno de sus jugadores. Pero centrémonos en su historia.

Tras haber pasado su carrera como futbolista con más pena que gloria, en la temporada 2006-2007 le llegó una oferta del Peterborough United para dar sus últimos coletazos en League Two y acepta la propuesta, que pocos meses después cambiaría su vida. El equipo estaba cerca de las zonas de descenso a Conference y se decidió cesar a Keith Alexander, como no se encontraba el perfil del entrenador deseado, se confió en la figura del entrenador jugador, tarea para la que Darren fue el elegido. Pocos confiaban en él, pero se juntó con Barry Fry en los despachos y comenzaron a firmar a gente de divisiones semiprofesionales o incluso amateurs y así llegaron Boyd, Mackail-Smith, McLean, Wehlpdale y compañía. Ferguson no solo salvó al club del desastre de ser relegado de categoría, sino que la temporada siguiente ascendería a League One.

En el apasionante año que esperaba al Peterborough en League One, la confianza del mundo del fútbol en que mantuvieran la categoría brillaba por su ausencia, algo que se confirmó tras un mal inicio, pero de repente todo comenzó a ir mejor, no solo se ganaban los partidos, sino que además se jugaba bien y así consiguieron lograr una más que sorprendente segunda plaza y ascender por segundo año consecutivo, esta vez a Championship. Un espectacular McLean con 29 goles, y Mackail-Smith y Boyd con 12 cada uno fueron los contribuyentes a esta gesta, pero sin el comando de Ferguson probablemente esto no habría sido posible.

Año de dudas, plantilla sin experiencia, pero se seguía confiando en lo que había para Championship, el entrenador comenzó bien el año, zona media baja pero lograba no sufrir demasiado, pero un mal mes de diciembre hizo que el equipo se situase colista con cuatro puntos de desventaja respecto a la salvación, lo cual consiguió que despidieden al preparador en el mes de enero.

En febrero, un histórico en apuros, el Preston, pidió a Ferguson que le salvase del descenso, lo hizo y con solvencia y la temporada siguiente, la 2010-2011 prometía ser exitosa. Nada más lejos de  la realidad, el equipo no levantaba cabeza, estaba en última posición y, otra vez en el mes de enero, fue despedido.

Tras este pequeño periplo, el Peterborough volvió a llamar a su puerta, a las dos semanas de ser despedido de su antiguo club, el Posh despidió a Gary Johnson por ir en quinta posición y defensivamente ser bastante paupérrimo cada planteamiento que maquinaba. Darren llegó, dejó al equipo cuarto, en Play off, con récord de goles, 111 en una temporada y recibiendo desde su llegada solo 24. En la final de la pomoción logró vencer en Old Trafford al Huddersfield que llevaba 27 partidos seguidos invicto.

El año pintaba otra vez gris, equipo otra vez sin experiencia en Championship, entrenador que no había cosechado buenos resultados en la división y un club que no tenía fe desde la hinchada en la salvación. Pero Darren es superior a eso, ha logrado mantener al equipo con dos jornadas de diferencia en lo matemático, pero en lo virtual a falta de cuatro se sabía de su permanencia. Ferguson lo ha logrado, ha conseguido batir a su división maldita, quizá el próximo objetivo sea la Premier.

jueves, 12 de abril de 2012

Nombre

La temporada de dos equipos recién ascendidos recientemente a Premier League está siendo fabulosa, plagada de buenos resultados y grandes momentos, pero el Swansea se está llevando mayor reconocimiento que el Norwich, justificando esto aquellos que elogian más a los de Rodgers que a quienes son entrenados por Lambert por el juego desplegado de unos y otros. Y digo yo, ¿un equipo que juega mejor que el otro pero está un peldaño por debajo en la tabla, ha de ser más elogiado?.

El conjunto de Brendan Rodgers es alabado cada partido por mantener la posesión más que el rival, tener una efectividad de pases casi perfecta, y hacer un fútbol atractivo a la vista. Parece que nadie mira lo malo entonces, porque es un equipo al que le falta algo de efectividad, que fuera de su estadio le cuesta mucho conseguir puntos y que defensivamente poco a poco está evidenciando unas lagunas hasta ahora no vistas debido al temporadón de su guardameta.

Es obvio el pedazo de año que está logrando en resultados, pues encontrarse en la zona cómoda para un equipo sin experiencia está muy bien, pero también puede que la gente no esté valorando suficiente lo logrado por el Norwich, con jugadores todavía más inexpertos y que hace un juego muy digno dentro de sus posibilidades, a, y otra cosa que se nos escapaba, está más arriba en la clasificación que los galeses.

Paul Lambert ha conseguido un bloque sólido, deficiente en defensa, como el otro equipo del que hablábamos, pero con las ideas muy claras, que hay mucha gente que no aprecia. Una delantera que este año disputa sus primeros partidos en Premier, unas bandas en las que hay gente que ni ha pasado por Championship, sí, Pilkington ha sido fichado de League One, y un centro del campo complementado a la perfección con gente de músculo pero técnicamente muy completa.

Es evidente que en estos momentos en los que prima lo bonito a lo efectivo, se elogie antes un pase en profundidad de tacón, que un centro del portero al área rival, pero quizá estemos abusando dando prensa a unos y no a otros, tan bonito ha de ser lo efectivo como el toque.

El nombre es lo que diferencia al Swansea y al Norwich, los galeses tienen a un hombre que ha trabajado para el todopoderoso Chelsea de Abramovich, los ingleses cuentan con un currante en el banco, pero que en tres temporadas ha logrado dos ascensos y una permanencia. Nombre, señores.

viernes, 16 de marzo de 2012

Stockport County, de posible equipazo a mediocridad pura.

Hennessey- Mullins, Williams, Owen, Rose- Blizzard, Gleeson, Pilkington, Rowe- Johnson, Dickinson.
Algunos de estos nombres ya son de sobra conocidos por los grandes espectadores del fútbol británico, otros, no tanto. Pero todos ellos tiene algo en común, en su día, formaron parte de un equipo que logró, contra todo pronóstico, ascender a League One en el Play-Off en una apasionante final contra el Rochdale en Wembley en la temporada 2007-2008.

A día de hoy tres de ellos se encuentran en Premier League, y el resto, son, como mínimo, jugadores de algún equipo profesional, paso por paso, vamos a situar a cada uno en su respectivo equipo.

En primer lugar, es conocido por todos el paradero de Weyne Hennessey, guardameta del Wolverhampton Wanderers, que es ojeado por multitud de grandes equipos y en su día fue objetivo del mismísimo Arsene Wenger. Portero de gran embergadura y buenos reflejos, que lleva dos temporadas a un gran nivel en Premier League y esta está siendo una pieza importante pese a que su equipo está en descenso.

Pasando a zona de defensas, la zaga tenía en el lateral derecho a Johny Mullins, canterano del Reading que no llegó a debutar con el primer equipo, y que fue fichado por el entonces entrenador Jim Gannon, procedente del Kidderminster Harriers. En la actualidad juega en League Two con el Roterham United, un conjunto que en un principio opta al ascenso. Es un lateral rápido, que le gusta subir al ataque, pero un poco inseguro en defensa.

En el eje de la zaga había un gran central, Ashley Williams, que tras el temporadón realizado fue cazado por Roberto Martínez para jugar en el Swansea en Championship. Esa temporada fue el alma del equipo, nadie le discutía su condición de líder de la zaga, como no se lo discuten ahora en la Premier League. Es un defensa portentoso, con buena salida de balón y muy correcto en los cortes. Protagonista en el gran año de los Swans.

Al lado de Williams había un compañero de lujo, Gareth Owen, después del año espectacular que hizo se lesionó y tuvo que ser vendido dos años después habiendo pasado con más pena que gloria, pero no ha dejado el fútbol profesional ni mucho menos, podemos verlo actuar en el Port Vale de League Two. Central rudo, poco amigo del juego corto y bastante lento, pero que cuenta con la fuerza física como mayor aliado.

En el lado izquierdo de la defensa se observaba a un joven Michael Rose, que aguantó toda la temporada en de titular pese a que le llegaba competencia en forma de cesiones cada momento que pasaba de la temporada. Hoy juega, a sus 30 años, en el Colchester United, conjunto de League One. Es un lateral contundente en defensa, no sube mucho al ataque y su mayor baza son los disparos de falta, que implican siempre un gran peligro para el conjunto rival.

Pasando al centro del campo, observamos quizá la zona más fuerte del Stockport esa temporada, con una gran fortaleza por las bandas para atacar y un centro del campo complementado perfectamente en cada uno de los momentos del partido.

Por la banda derecha iba un futbolista que hoy por hoy juega en Premier League con el Norwich City, no es otro que Anthony Pilkington, jugador que empieza a ser algo más que una promesa, y pasa a convertirse en realidad. Es un puñal por su zona, el flanco derecho del césped, y su arma principal es la penetración hacia el interior, que suele terminar con fuertes disparos.

En el centro encontramos a un centrocampista por el que se han pegado este verano en Championship, pero que se ha quedado en el MK Dons de League One, ese es Stephen Gleeson. Jugador que da auténtica sensación de poderío en su zona, que tan fácil recupera un balón, como lo da perfectamente al delantero para que anote. El verano que le espera a su agente puede ser muy agotador.

Al lado de Gleeson se podía ver a Dominic Blizzard, quizá este fue el jugador del año en el equipo de Edgeley Park. Dominaba la parcela defensiva en el medio, no dejaba pasar a los rivales y fue ojeado por algún conjunto de Championship, pero quedó en nada. Juega actualmente en el Yeovil Town de League One.

Por banda izquierda actuaba Tommy Rowe, la aparición más sorprendente de la temporada, fue subido al primer equipo procedente del juvenil y en su debut dio una asistencia de gol y terminó ovacionado por su afición y la rival. Es un jugador polivalente, puede jugar por toda la zona izquierda y además de centrocampista, y lo hace de maravilla en el Peterborough United, de Championship.

La delantera estaba compuesta por dos atacantes muy jóvenes que buscaban un lugar en el gran mundo del fútbol, esa temporada fue una auténtica revolución, pues entre los dos no sumaban ni 40 años, y goleaban ante gente de casi esa edad.

Liam Dickinson era el más experimentado de los dos, tenía 21 años y muchas ganas de demostrar su valía, tanto que cada partido salía a morder y casi en todos lo conseguía. Fue el máximo goleador y llegó a ser considerado el mejor delantero fuera de la Premier League ese año. Es un atacante alto, portentoso, fuerte y rápido, y actualmente desempeña su trabajo en el Southend de League Two.

Su compañero en la delantera fue Oli Johnson, poco conocido pese a haber estado en el Norwich City, ese fue un periplo complicado para él, derivado de la temporada tan buena que se marcó con el Stockport. Tras la marcha de Adam Le Fondre y la falta de fondos para sustituirle, recurrieron a un delantero de 17 años, que es nuestro protagonista. Metió muy pocos goles, pero abría muchos huecos para sus compañeros, su principal función. Es un delantero rápido, pero le queda mucho por mejorar, y lo intentará en el Oxford United.

Aunque nos dejamos a futbolistas que han estado en este club y se encuentran en divisiones mayores a la Conference, donde actúa esta temporada, no se pueden nombrar todos, y lo que se espera es que el espectador se haga a la idea del equipo que tuvo en su día, y de lo que actualmente tiene, que son jugadores de un nivel muy inferior al de estos futbolistas.


Stockport County, de posible equipazo a mediocridad pura.

Hennessey- Mullins, Williams, Owen, Rose- Blizzard, Gleeson, Pilkington, Rowe- Johnson, Dickinson.
Algunos de estos nombres ya son de sobra conocidos por los grandes espectadores del fútbol británico, otros, no tanto. Pero todos ellos tiene algo en común, en su día, formaron parte de un equipo que logró, contra todo pronóstico, ascender a League One en el Play-Off en una apasionante final contra el Rochdale en Wembley en la temporada 2007-2008.

A día de hoy tres de ellos se encuentran en Premier League, y el resto, son, como mínimo, jugadores de algún equipo profesional, paso por paso, vamos a situar a cada uno en su respectivo equipo.

En primer lugar, es conocido por todos el paradero de Weyne Hennessey, guardameta del Wolverhampton Wanderers, que es ojeado por multitud de grandes equipos y en su día fue objetivo del mismísimo Arsene Wenger. Portero de gran embergadura y buenos reflejos, que lleva dos temporadas a un gran nivel en Premier League y esta está siendo una pieza importante pese a que su equipo está en descenso.

Pasando a zona de defensas, la zaga tenía en el lateral derecho a Johny Mullins, canterano del Reading que no llegó a debutar con el primer equipo, y que fue fichado por el entonces entrenador Jom Gannon, procedente del Kidderminster Harriers. En la actualidad juega en League Two con el Roterham United, un conjunto que en un principio opta al ascenso. Es un lateral rápido, que le gusta subir al ataque, pero un poco inseguro en defensa.

En el eje de la zaga había un gran central, Ashley Williams, que tras el temporadón realizado fue cazado por Roberto Martínez para jugar en el Swansea en Championship. Esa temporada fue el alma del equipo, nadie le discutía su condición de líder de la zaga, como no se lo discuten ahora en la Premier League. Es un defensa portentoso, con buena salida de balón y muy correcto en los cortes. Protagonista en el gran año de los Swans.

Al lado de Williams había un compañero de lujo, Gareth Owen, después del año espectacular que hizo se lesionó y tuvo que ser vendido dos años después habiendo pasado con más pena que gloria, pero no ha dejado el fútbol profesional ni mucho menos, podemos verlo actuar en el Port Vale de League Two. Central rudo, poco amigo del juego corto y bastante lento, pero que cuenta con la fuerza física como mayor aliado.

En el lado izquierdo de la defensa se observaba a un joven Michael Rose, que aguantó toda la temporada en de titular pese a que le llegaba competencia en forma de cesiones cada momento que pasaba de la temporada. Hoy juega, a sus 30 años, en el Colchester United, conjunto de League One. Es un lateral contundente en defensa, no sube mucho al ataque y su mayor baza son los disparos de falta, que implican siempre un gran peligro para el conjunto rival.

Pasando al centro del campo, observamos quizá la zona más fuerte del Stockport esa temporada, con una gran fortaleza por las bandas para atacar y un centro del campo complementado perfectamente en cada uno de los momentos del partido.

Por la banda derecha iba un futbolista que hoy por hoy juega en Premier League con el Norwich City, no es otro que Anthony Pilkington, jugador que empieza a ser algo más que una promesa, y pasa a convertirse en realidad. Es un puñal por su zona, el flanco derecho del césped, y su arma principal es la penetración hacia el interior, que suele terminar con fuertes disparos.

En el centro encontramos a un centrocampista por el que se han pegado este verano en Championship, pero que se ha quedado en el MK Dons de League One, ese es Stephen Gleeson. Jugador que da auténtica sensación de poderío en su zona, que tan fácil recupera un balón, como lo da perfectamente al delantero para que anote. El verano que le espera a su agente puede ser muy agotador.

Al lado de Gleeson se podía ver a Dominic Blizzard, quizá este fue el jugador del año en el equipo de Edgeley Park. Dominaba la parcela defensiva en el medio, no dejaba pasar a los rivales y fue ojeado por algún conjunto de Championship, pero quedó en nada. Juega actualmente en el Yeovil Town de League One.

Por banda izquierda actuaba Tommy Rowe, la aparición más sorprendente de la temporada, fue subido al primer equipo procedente del juvenil y en su debut dio una asistencia de gol y terminó ovacionado por su afición y la rival. Es un jugador polivalente, puede jugar por toda la zona izquierda y además de centrocampista, y lo hace de maravilla en el Peterborough United, de Championship.

La delantera estaba compuesta por dos atacantes muy jóvenes que buscaban un lugar en el gran mundo del fútbol, esa temporada fue una auténtica revolución, pues entre los dos no sumaban ni 40 años, y goleaban ante gente de casi esa edad.

Liam Dickinson era el más experimentado de los dos, tenía 21 años y muchas ganas de demostrar su valía, tanto que cada partido salía a morder y casi en todos lo conseguía. Fue el máximo goleador y llegó a ser considerado el mejor delantero fuera de la Premier League ese año. Es un atacante alto, portentoso, fuerte y rápido, y actualmente desempeña su trabajo en el Southend de League Two.

Su compañero en la delantera fue Oli Johnson, poco conocido pese a haber estado en el Norwich City, ese fue un periplo complicado para él, derivado de la temporada tan buena que se marcó con el Stockport. Tras la marcha de Adam Le Fondre y la falta de fondos para sustituirle, recurrieron a un delantero de 17 años, que es nuestro protagonista. Metió muy pocos goles, pero abría muchos huecos para sus compañeros, su principal función. Es un delantero rápido, pero le queda mucho por mejorar, y lo intentará en el Oxford United.

Aunque nos dejamos a futbolistas que han estado en este club y se encuentran en divisiones mayores a la Conference, donde actúa esta temporada, no se pueden nombrar todos, y lo que se espera es que el espectador se haga a la idea del equipo que tuvo en su día, y de lo que actualmente tiene, que son jugadores de un nivel muy inferior al de estos futbolistas.


Stockport County, de posible equipazo a mediocridad pura.

Hennessey- Mullins, Williams, Owens, Rose- Blizzard, Gleeson, Pilkington, Rowe- Johnson, Dickinson.
Algunos de estos nombres ya son de sobra conocidos por los grandes espectadores del fútbol británico, otros, no tanto. Pero todos ellos tiene algo en común, en su día, formaron parte de un equipo que logró, contra todo pronóstico, ascender a League One en el Play-Off en una apasionante final contra el Rochdale en Wembley en la temporada 2007-2008.

A día de hoy tres de ellos se encuentran en Premier League, y el resto, son, como mínimo, jugadores de algún equipo profesional, paso por paso, vamos a situar a cada uno en su respectivo equipo.

En primer lugar, es conocido por todos el paradero de Weyne Hennessey, guardameta del Wolverhampton Wanderers, que es ojeado por multitud de grandes equipos y en su día fue objetivo del mismísimo Arsene Wenger. Portero de gran embergadura y buenos reflejos, que lleva dos temporadas a un gran nivel en Premier League y esta está siendo una pieza importante pese a que su equipo está en descenso.

Pasando a zona de defensas, la zaga tenía en el lateral derecho a Johny Mullins, canterano del Reading que no llegó a debutar con el primer equipo, y que fue

viernes, 9 de marzo de 2012

Dag & Red, el equipo más 'aficionado' de la Football League

Es normal, cada día con más frecuencia, en  las islas británicas, que conjuntos profesionales alimenten sus plantillas con gente de ligas semiprofesionales o incluso de aficionados, pero los Daggers van mucho más allá.
Por mediación de su entrenador, John Still, han logrado crear un bloque formado casi en su mayoría de futbolistas que hasta hace más bien poco, vivían lejos de los focos de la prensa intentando alcanzar la fama de ser vistos por miles de personas.
Para situar a los lectores, vamos a hablar sobre los más destacados, y a nombrar a aquellos tarde o temprano serán importantes en los planes de este equipo de barrio.

En primer lugar, podemos encontrar a Josh Scott. Este delantero pasará a la historia dagger por ser el héroe de la eliminatoria en la fase de ascenso de la temporada 2009-2010, al meterle 5 goles al Morecambe, en la espectacular victoria por 7-0 que se logró por parte de los pupilos de Still.
Su trayectoria nada tiene que ver con la fama de goleador que cogió tras ese partido, pues hasta entonces, llevaba sólo 5 tantos en toda la temporada, y en su carrera deportiva, no llevaba más de 10.
Anteriormente a desempeñarse como jugador del Dagenham & Redbridge FC, Scott actuó para un equipo tan desconocido para el público como el Hayes & Yeading, un modesto conjunto que, aunque actualmente milita en la Conference (5ª división), en el momento en el que este futbolista jugaba allí, vagaba entre las 6ª y la 7ª categoría.

Otro ejemplo de futbolista aficionado que llega a profesional gracias a este equipo, es Scott Doe. Defensa central joven, líder de la zaga desde su llegada y uno de los principales candidatos a marcharse a algún equipo superior este verano.
Este zaguero es fruto del sistema de cantera del Weymouth FC, del cual salió como una bala directo a la titularidad en el primer equipo. En su primera temporada en este conjunto, logró un ascenso a la 5ª máxima categoría, y en la segunda, la permanencia de una forma bastante sobrada.
Still no tuvo reparo a la hora de preguntar por él y firmarle, acierto total del preparador inglés.

Por último, vamos a centrarnos en otro icono del equipo, como es el atacante Jon Nurse.  Es un jugador muy experimentado, ha logrado ascensos allá donde ha estado, incluso hace mejores a sus compañeros.
Salió del Sutton United, equipo de la 8ª división por entonces, para ser fichado por Stevenage y Woking, donde fue haciéndose un hueco hasta llegar al conjunto donde se encuentra actualmente, el Dagenham & Redbridge.

Otros jugadores importantes aparecidos de las ligas aficionadas son, el delantero Jake Reed, el centrocampista Danny J Green o el guardameta Chris Lewington, gente que a corto plazo, será titular.

En cambio, hay jóvenes talentos a los que les costará hacerse un sitio en la titularidad, como por ejemplo Rob Edmans, Dwight Gayle o Brian Woodall.

En conclusión, solo podemos decir que esta política de fichajes no es nueva, y ya ha logrado un gran éxito, CRAIG MACKAIL-SMITH, delantero del Brighton & Hove Albion, pasó por el club al que hoy hemos dedicado un poco de tiempo, porque se lo merece, atentos a lo que pueda acontecer en las próximas temporadas acerca de los nombres aquí plasmados.

sábado, 25 de febrero de 2012

Malas pasadas.

Son muchos los conjuntos echados en falta por los aficionados a la Premier League en los años 90, dentro de lo recordado por estos, instituciones como el Nottingham Forest, el Leeds United, el Leicester City o el Wimbledon. Desde 'fútbol modesto...y no tanto' vamos a intentar situar, por orden de importancia de los equipos, a los lectores acerca del lugar en el que se encuantran actualmente estos clubes.

En primer lugar, el bicampeón de Europa se encuentra batallando en las zonas más oscuras de la Championship, probablemente sin encontrar excusas para no tener a sus hinchas sometidos, semana tras semana, a la agonía constante e incesante de pensar si ese partido van a cosechar por fin una victoria (cierto es que ahora llevan una buena racha).
Lejos quedan sus tardes de gloria, bajo la batuta del gran  Clough. Tras su caída de la categoría reina en el año 19999, sus 12 temporadas restantes se pueden resumir en tres años en League One (entre 2005 y 2008) y el resto en Championship, división en la que, quitando de alguna temporada más o menos aceptable, ha pasado bastante tiempo sufriendo.
Sus estrellas actuales son Lewis McGugan, canterano, el cual puede actuar de mediapunta, aunque Steve Coterill, actual entrenador, le haga jugar por bandas. Garath McCleary, extremo con una extraordinaria rapidez y con llegada, probablemente el jugador del año esta temporada. Por ultimo, su otra estrella la encontramos en el guardameta, el internacional por Irlanda del Norte, Lee Camp, que con sus paradas está cerca de llamar a la Premier League de aquí a no demasiado tiempo.

Pasemos a mentar al Leeds United, conjunto no mucho más agraciado que los 'Reds', desde su descenso en la temporada 2003-2004 de la Premier League tan sólo cuenta que desgracias en su haber. Descendió la temporada 2006-2007 a League One y estuvo en ella hasta la 2009-2010. Desde su regreso a la categoría de plata cuenta con un intento fracasado de entrar en el Play Off y este curso tiene pinta de que no va a ser diferente.
A destacar queda que este club estuvo a punto de desaparecer por deudas, de hecho, su descenso se produjo a causa de una deducción de 10 puntos a causa de la entrada en administración.
Sus principales figuras actualmente son un argentino llamado Luciano Becchio, que lleva dos temporadas llamando a la máxima categoría, y Ross McCormack, también punta, junto al anteriormente mencionado forma una gran pareja.

Otro conjunto desechado en la Football League es el Leicester City, que lleva el mismo camino que el Leeds United variando que los del Walker's Stadium (siempre será así, no King Power), sólo estuvieron una campaña en la League One.
Muy borrosas quedan las tardes de gloria con Martin O'Neill en el banquillo capitaneando un proyecto de aventuras que llegaban a buen puerto.
Actualmente son el club más rico de Championship gracias a un grupo inversor tailandés, el cual ha hecho todo lo posible para lograr que el equipo marchara primero en la categoría de plata, y se lo encuentran en mitad de tabla, perdiendo con rivales menores.
Estos ilusos del sureste asiático han confeccionado una plantilla cuyos máximos exponentes son Jermaine Beckford, delantero ex del Leeds y del Everton, y Kasper Schmeichel, huardameta ex del Manchester City e hijo de Peter Schmeichel, mito del Manchester United.

Para finalizar con esta ruta sobre equipos venidos a menos, vamos a mencionar un caso especial, el del Wimbledon. Este club se ha reinventado, en sentido literal, tras desaparecer en el año 2004, aunque no del todo, pues el equipo se trasladó a Milton Keynes.
Ese mismo año, un grupo de aficionados, reacios a que desapareciese el club de toda su vida, crearon el AFC Wimbledon, desde la categoría 9ª, la más baja del fútbol inglés, 8 años después, se encuentran en la League Two, la 4ª, la cual ya es profesional. Atrás quedan esas tardes de bonanza futbolística, no en estilo, sí en efectividad, en la que el conjunto de la capital ganaba a los grandes practicando el famoso kick and rush, que era un fútbol parecido al del Stoke City en la actualidad.
Su estrella principal en la actualidad es un joven centrocampista llamado Rashid Yussuff, el cual tarde o trmprano dará el salto a la Championship.

Son muchos más los clubes ingleses que han disfrutado de plasmar en los marcadores de sus estadios victorias contra los mejores del país, pero la historia les ha jugado una mala pasada. Esperemos su regreso más pronto que tarde.

jueves, 23 de febrero de 2012

Humildad verdadera

El ejemplo más recurrente que puede venir a la cabeza de un aficionado al fútbol inglés para hablar de conjuntos construidos a partir de jugadores de dos e incluso tres divisiones menores a la que el equipo juega sus partidos es el Norwich. Desde Marc Tierney hasta Grant Holt son muchos los futbolistas de los 'Canaries' que han estado en ligas de un nivel mucho menor que la Premier League, o incluso en categorías amateurs.

Es un caso llamativo, pues con estas peculiaridades el club que entrena el escocés Paul Lambert está logrando un noveno puesto en la máxima categoría que, sumado a dos ascensos consecutivos hace que el aficionado común solo pueda sentir admiración hacia este equipo.

Hace tres temporadas descendían tres conjuntos históricos de la Championship, el Charlton, el cual sigue en League One aunque lider, el Southampton, segundo clasificado actualmente de la propia Championship y el conjunto actualmente dirigido por el preparador escocés. Esto trajo consigo unas consecuencias devastadoras en lo económico, pero también produjo un planteamiento totalmente nuevo en cuanto a política de fichajes de los 'Canaries'.

En primer lugar, se eligió a jugadores de la propia League One y de la League Two, algo que sorprendió porque un conjunto que era bastante ás conocido que el resto de clubes de la división, podía atraer a gente de mayor nivel para jugar esa temporada. Pero el DT estaba convencido de que su política a la hora de fichar daría resultados, tanto que, pese a  una primera derrota ante el Colchester por 6-1, abultada goleada, dicho sea de paso, este equipo sólo supo crecer desde ese instante. Ese mismo año terminó líder de League One, superando a un Leeds United que contaba con gente como Fabian Delph, Luciano Becchio, Jaermaine Beckford o Johnatan Howson.

En segundo lugar, se pretendía mantener a gente que vivió el descenso, así, por ejemplo, mantuvieron a Simon Lappin, un extremo escocés de mucha rapidez y gran centro y  a Adam Drury, lateral izquierdo de gran recorrido y correcto a nivel defensivo.

Por último, se fichó a gente con experiencia en la categoría de la que fueron relegados, como Wesley Hoolahan, el cual se ha logrado hacer un sitio en el once de Lambert cada semana desde esa temporada.

Tras ascender haciendo un juego muy 'europeo' se quiso mantener la filosofía de fichajes, y aunque se contrató a gente como Leon Barnett o Andrew Surman, de Premier League ambos, esto fue acompañado por los fichajes a los que el DT mostró confianza como Andrew Crofts del Brighton y David Fox, del Colchester, siendo estos dos de League One y a Simeon Jackson, delantero canadiense recién descendido a League Two.

Después de lograr el ascenso a Premier League, este verano pasado se quiso pensar en la salvación, para tal reto, se contó con gente como Daniel Ayala y Kyle Naughton, con apenas experiencia en la máxima categoría, pero el entrenador escocés acompañó estos fichajes con las adquisiciones de Bradley Johnson y Steve Morison, el cual ha pasado por todas las divisiones del fútbol inglés desde la sexta hasta la primera, estos dos contratados de Championship, El fichaje de división más baja fue Anthony Plikington, llegado procedente del Huddersfield Town de League One y pieza clave esta temporada.


Está claro que no siempre ir a lo mediático e intentar dar la nota con cada fichaje es la solución, de momento, al conjunto inglés no le va nada mal, como anteriormente hemos dicho deambula en la novena posición y además ha fichado a la última perla en lo que a defensas ingleses se refiere, Ryan Bennett, procedente del Peterborough. Son contrataciones que hoy por hoy no tienen demasiada importancia en el panorama futbolístico mundial, pero que dentro de dos o tres temporadas, quizá sí lo sean protagonizando traspasos por grandes cifras a grandes clubes.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Cuestión de estilos

En una sociedad estereotipada cada vez a mayor nivel y que avanza en ciertos aspectos a pasos agigantados el fútbol no podía ser menos. Toda la evolución del fútbol ha llevado a un choque de estilos que sería muy interesante ver en un futuro, ese choque se daría en un partido entre FC Barcelona y Stoke City FC.

Los primeros son actualmente los referentes del balompié a nivel mundial, el estilo de 4-3-3 con defensas que tienen una muy buena salida de balón y una alternancia constante de posiciones a partir de las tres cuartas partes del campo han sembrado una manera de jugar al fútbol muy depurada en lo técnico y muy novedosa a nivel táctico, esto, junto a la gerencia de Pep Guardiola desde el banco ha sido aquello que ha logrado que este equipo se consagre en el firmamento del fútbol y sea considerado junto a equipos como el 'Brasil de los 70' uno de los mejores equipos de la historia.

En cuanto a los ingleses, por la mayoría de los aficionados al fútbol en las islas es conocido el estilo que, no por novedoso, ni por sorprendente, ha cautivado a la mayoría de los seguidores del panorama futbolístico. Su planteamiento es quizá el más rústico del fútbol mundial, un 4-4-2 con defensas con buen pase largo, centrocampistas de mucho músculo y delanteros que tienen en el juego de espaldas su mayor baza.
Como el Barça, el conjunto de las islas cuenta también con un maestro de ceremonias genial, no es otro que Toni Pullis, entrenador que tiene el  mérito de, sin haber estado nunca en un grande, y compitiendo siempre con presupuestos bajos, en ninguna temporada ha tenido que vivir la amarga experiencia de descender.

Un duelo entre estos dos equipos seguramente sería decantado a favor de los catalanes, pues tienen mejor plantilla que el los ingleses, pero les lanzo una pregunta...¿Cuánto pagarían por ver este partido en un estadio como el Britannia?

Es una cuestión de estilos, pero es casi seguro que a la mayoría de aficionados les gusta tanto uno como el otro tipo de juego.

viernes, 17 de febrero de 2012

El enchufismo, la lacra principal.

A menudo encontramos casos de futbolistas que se encuentran en divisones desconocidas con grandes capacidades para enfrentarse fácilmente a equipos de mayor nivel a los que tienen actuando como rivales, esto se debe a un fenómeno que ha arrasado, junto a la crisis económica, al balompié español. Sí, señores, hablamos del enchufismo. Se trata de un mecanismo muy sencillo de fichar a un jugador, este, movido por los contactos que tiene de haber estado en buenas escuelas por suerte de tener padres agraciados a nivel económico, o por suerte de que le saliese el típico partido en el que arrasó con todo lo que le pusieron por delante y le ficharon, coge el teléfono y le dice al amigo de turno que le haga un ''huequecito'' en su equipo, este, sin problemas, quita a quien sea, aunque pueda ser el descarte el mejor de la plantilla para meter en el plantel a un jugador que conoció en el equipo X la temporada Y, con el cual hizo una amistad de intereses permanente.

Este problema se está convirtiendo en la principal lacra del fútbol español, aunque en el resto de países exista, en ninguno de estos seguramente habrá un jugador como Pablo Infante en la tercera categoría, o un futbolista como Manuel Gato vagando constantemente en equipos de zona baja de segunda y zona alta de segunda b.

Es un tema para hacérselo mirar, no vamos a nombrar a futbolistas que están en la élite sin merecerlo, porque evidentemente si han llegado, no vamos a ser nosotros quienes tengan la dudosa cualidad de discutirles tal hecho, y también porque no son ellos los culpables, son los equipos, causantes de que cada fichaje foráneo se convierta en una oportunidad de ventas de camisetas y de que cada acción de traspaso realizada dentro de las fronteras de este país sean cada vez menos mediáticas.

La vergüenza de hablar de este tipo de cosas solo es comparable con la de autodenominarnos la mejor liga del mundo y tener una competición cada vez más bipolar, consecuencia, entre muchas otras cosas, de fenómenos como el enchufismo. Hay que dar rienda suelta a la imaginación y a la confianza de que los clubes, vista la penumbra económica en la que se encuantran en ciertas ocasiones, empezarán a dejar de malgastar el dinero y se centrarán en lo verdaderamente importante, fichar confiando en los buenos, no fiando los fichajes a los bonachones.